Napoleón Bonaparte fue un emperador francés. Nació en el seno de una familia escasa de recursos en Ajaccio, Córcega, un territorio dominado por los franceses, el 15 de agosto de 1769. Su padre, Carlos Bonaparte, era militar de profesión, y su madre, Leticia Ramolino, pertenecía a linaje distinguido.
En 1778, Napoleón, junto con su hermano José, viajó a Francia e ingresó en la Escuela Militar de Brienne, aprovechando la beca que la administración francesa le concedió. De carácter huraño, encontró dificultades para adaptarse al nuevo ambiente debido, entre otras cosas, al desconocimiento del idioma. Y estudió intensamente.
En 1784 pasó a la Escuela Militar de París en el arma de artillería. Un año después, apremiado en el estudio por las responsabilidades que le surgen con la muerte de su padre, ya era teniente. Volvió a Córcega y trabajó en su liberación ante la opresión francesa, siendo testigo de la Revolución, pero poco pudo hacer por su país. En 1793, es nombrado segundo jefe de artillería del ejército republicano y resuelve el sitio de Tolón con la toma de la plaza. En 1794 es ascendido y recibe el mando de los ejércitos de artillería en Italia.
Con el golpe de Estado de Thermidor, le sobrevino una crisis profesional, llegando incluso a estar dado de baja. Pero las dificultades del gobierno hacen que vuelva a Italia al mando de las tropas francesas. Antes, en 1796, se casó con Josefina la Pagerie. La popularidad que consiguió con sus acciones y campañas en Italia le convirtieron en alguien peligroso para el Directorio. Pero nada pudieron contra él: consiguió la victoria y la paz. Venció a los sardos y a los austríacos en abril y mayo de 1796, y desempeñó funciones diplomáticas y administrativas en los territorios conquistados.
En 1 797 regresó a París. El Directorio le seguía temiendo pero lo pone al frente de la expedición a Egipto, cuya misión era la derrota del ejército británico. Pero cuando el inglés Nelson hunde la escuadra francesa, los expedicionarios quedan aislados. Talleyrand, Sieyés y Fouché ya preparaban el golpe que había de destituir al Directorio y evitar la restauración borbónica, pensando en Napoleón para llevarlo a efecto.
Se le nombró comandante militar de París en el golpe de Estado del 18 Brumario. El 19 consiguió la dimisión del Directorio y se inició la formación de un gobierno más sólido a partir de una nueva Constitución. El ejército disolvió la Cámara. Bonaparte, Sieyés y Roger-Ducos constituyeron el triunvirato en que recayó el gobierno. Por propia imposición, Napoleón es nombrado primer cónsul con privilegios específicos. Napoleón restableció el orden, pacificó las conciencias e inició el saneamiento de la economía; por todo ello, creció aún más su popularidad.
En 1801 firmó una paz ventajosa con los austríacos y en Amíens, con Inglaterra. Napoleón se hizo nombrar cónsul vitalicio. Pero la paz de Amíens era demasiado precaria y en 1803 estalló de nuevo la guerra. Napoleón transformó la Constitución y legalizó su poder absoluto: se proclamó emperador. Su propósito era lograr la radical transformación de Europa, pretendiendo ejercer en ella el máximo exponente del despotismo ilustrado.
Si bien fracasa su desembarco en Inglaterra, su éxito es absoluto en Austria. En 1807 derrotó también a Rusia; Italia, Holanda y la Confederación Helvética ya le pertenecían. A principios de 1808, los ejércitos napoleónicos tomaron los estados pontificios y asumieron posiciones en España con el pretexto de la conquista de Portugal. Se produjo el alzamiento del 2 de mayo en Madrid y se inició la guerra contra los franceses (guerra de la Independencia). Napoleón se casó con María Luisa, en Austria, para entroncar con las dinastías más antiguas y tener el heredero que Josefina no le había dado.
En 1811 Rusia le declaró la guerra. Esta campaña debilitó enormemente los ejércitos imperiales. En 1813, se produjo la ofensiva anglo-española que fue definitiva, y también la aliada en Italia y Alemania. Napoleón fue decisivamente derrotado en la batalla de Leipzig y París cae en manos extranjeras en 1814. Napoleón abdicó y fue confinado a la isla de Elba. No obstante, un año después reapareció en Francia. Su derrota fue definitiva en Waterloo el 18 junio de 1815 y, tras abdicar de nuevo, es desterrado a Santa Elena, donde vivió sus últimos cinco años.
En 1778, Napoleón, junto con su hermano José, viajó a Francia e ingresó en la Escuela Militar de Brienne, aprovechando la beca que la administración francesa le concedió. De carácter huraño, encontró dificultades para adaptarse al nuevo ambiente debido, entre otras cosas, al desconocimiento del idioma. Y estudió intensamente.
En 1784 pasó a la Escuela Militar de París en el arma de artillería. Un año después, apremiado en el estudio por las responsabilidades que le surgen con la muerte de su padre, ya era teniente. Volvió a Córcega y trabajó en su liberación ante la opresión francesa, siendo testigo de la Revolución, pero poco pudo hacer por su país. En 1793, es nombrado segundo jefe de artillería del ejército republicano y resuelve el sitio de Tolón con la toma de la plaza. En 1794 es ascendido y recibe el mando de los ejércitos de artillería en Italia.
Con el golpe de Estado de Thermidor, le sobrevino una crisis profesional, llegando incluso a estar dado de baja. Pero las dificultades del gobierno hacen que vuelva a Italia al mando de las tropas francesas. Antes, en 1796, se casó con Josefina la Pagerie. La popularidad que consiguió con sus acciones y campañas en Italia le convirtieron en alguien peligroso para el Directorio. Pero nada pudieron contra él: consiguió la victoria y la paz. Venció a los sardos y a los austríacos en abril y mayo de 1796, y desempeñó funciones diplomáticas y administrativas en los territorios conquistados.
En 1 797 regresó a París. El Directorio le seguía temiendo pero lo pone al frente de la expedición a Egipto, cuya misión era la derrota del ejército británico. Pero cuando el inglés Nelson hunde la escuadra francesa, los expedicionarios quedan aislados. Talleyrand, Sieyés y Fouché ya preparaban el golpe que había de destituir al Directorio y evitar la restauración borbónica, pensando en Napoleón para llevarlo a efecto.
Se le nombró comandante militar de París en el golpe de Estado del 18 Brumario. El 19 consiguió la dimisión del Directorio y se inició la formación de un gobierno más sólido a partir de una nueva Constitución. El ejército disolvió la Cámara. Bonaparte, Sieyés y Roger-Ducos constituyeron el triunvirato en que recayó el gobierno. Por propia imposición, Napoleón es nombrado primer cónsul con privilegios específicos. Napoleón restableció el orden, pacificó las conciencias e inició el saneamiento de la economía; por todo ello, creció aún más su popularidad.
En 1801 firmó una paz ventajosa con los austríacos y en Amíens, con Inglaterra. Napoleón se hizo nombrar cónsul vitalicio. Pero la paz de Amíens era demasiado precaria y en 1803 estalló de nuevo la guerra. Napoleón transformó la Constitución y legalizó su poder absoluto: se proclamó emperador. Su propósito era lograr la radical transformación de Europa, pretendiendo ejercer en ella el máximo exponente del despotismo ilustrado.
Si bien fracasa su desembarco en Inglaterra, su éxito es absoluto en Austria. En 1807 derrotó también a Rusia; Italia, Holanda y la Confederación Helvética ya le pertenecían. A principios de 1808, los ejércitos napoleónicos tomaron los estados pontificios y asumieron posiciones en España con el pretexto de la conquista de Portugal. Se produjo el alzamiento del 2 de mayo en Madrid y se inició la guerra contra los franceses (guerra de la Independencia). Napoleón se casó con María Luisa, en Austria, para entroncar con las dinastías más antiguas y tener el heredero que Josefina no le había dado.
En 1811 Rusia le declaró la guerra. Esta campaña debilitó enormemente los ejércitos imperiales. En 1813, se produjo la ofensiva anglo-española que fue definitiva, y también la aliada en Italia y Alemania. Napoleón fue decisivamente derrotado en la batalla de Leipzig y París cae en manos extranjeras en 1814. Napoleón abdicó y fue confinado a la isla de Elba. No obstante, un año después reapareció en Francia. Su derrota fue definitiva en Waterloo el 18 junio de 1815 y, tras abdicar de nuevo, es desterrado a Santa Elena, donde vivió sus últimos cinco años.
Comentarios
Publicar un comentario